Marruecos me impactó en su riqueza cultural posee una tierra llena de historia y tradiciones .
Su comida, el arte que fabrica, especies.
Fue una experiencia gratificante poder pasar una semana con mi pareja en ese país donde no paramos de recorrer kilómetros de distancia desde norte a sur pudiendo disfrutar de su belleza natural pasando por mar, montaña, ciudades, y desierto.
TÁNGER LA ENTRADA HACIA ÁFRICA
Podemos divisar Tánger es un puerto marroquí en el Estrecho Gibraltar teniendo importancia entre África y Europa. Desde Tarifa o Algeciras en barco podemos llegar a Marruecos.
Nosotros no llegamos en barco fuimos en avión, el primer día fue tranquilo.
Pudimos disfrutar de su encalada Medina (centro antiguo )o kasbah( antigua fortificación amurallada ).
Al siguiente día contratamos un servicio con un chico que conocía todo el norte de Tánger y pudimos arreglar por un módico precio visitar toda la costa incluido el pueblo pescador de Asilah.
A 15 Km al norte de Tánger nos encontramos con El Cabo Espartel donde desde su faro pudimos ver como el Atlántico abraza al Mediterráneo.
CHEFCHAOUEN PUEBLO AZUL
Al siguiente día volvimos a quedar con nuestro guía ya que el primer día había sido bastante enriquecedor. Esta vez nos adentramos a una nueva aventura.
Subiendo montañas a dos horas de Tanger nos encontramos con el bello pueblo azul.
Su medina cuyas casas, paredes y mezquitas se tiñen de azul para formar la acuarela más fascinante de Marruecos.
En su gastronomía prevalece la ensalada queso de cabra casero, o la sopa Marroquí, su artesanía en cuero natural, (allí pude conseguir un bolso precioso de cuero) los desayunos son un manjar.
EL ARTE CALLEJERO DE MARRAKECH
Llegamos a Marrakech después de doce horas en un tren (cama) en el que pudimos descansar antes de llegar a el hotel y ponernos a recorrer su centro antiguo.
Si vais a Marrakech no olvidéis de pasar por su zoco (mercado tradicional)
un laberinto de callejuelas llenas de puestos y tenderetes, es la cuna del regateo. Allá puedes encontrar de todo, a mi me encanto un bol de madera para la belleza facial pero no pude conseguir el que buscaba por mucho regateo que hubiese..jaja
En cambio pudimos encontrar desde minerales aromáticos, cristales con mentol, cientos de especies distintas que impregnan con su aroma sus calles. El jabón de beldi hecho de aceite de oliva con propiedades exfoliantes, el aceite de argán hidratante y embellecedor para pelo y piel.
También vivimos la experiencia de un hammam marroquí, si alguna vez la viviste la recordarás por el jabón negro, la sauna caliente, o como se quedo tu piel de extremadamente fina y suave( también recordarás como las chicas frotan y se mojan de agua hasta las orejas)
Sin olvidarnos de disfrutar del té verde con menta en todo lugar por el que pasas, su delicioso sabor. También la acidez como se acaba adueñando de ti.
DESIERTO MERZOUGA
La experiencia mas especial sin duda a sido ver el desierto de Merzouga su gente bereber, la raza más antigua de África septentrional, sus ropas marcan la diferencia entre árabes y bereberes.
Andar entre sus dunas de arena y perderte entre ellas. Pasar una noche entre sonidos de timbales y el silencio total si deseas reencontrarte contigo mismo es una forma de llegar a ti.
O bien recorrer sus dunas en un quad y disfrutar de un bello amanecer conectando con tu interior. (Esa será una de las experencias más inolvidables para mi )
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